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sábado, 4 de septiembre de 2010

Infiel

Inútil es tu sueño,
mientras duermes en mis brazos
con dulzura,
yo distante vago
en un recuerdo cuyo tiempo
no ha pasado.
Te miro, eres preciosa;
blancas, puras,
tus ilusiones como tus manos.
¿Por qué llegaste tarde a mi vida?
No te puedo querer
y sólo bebes de mis labios la amargura
que aquella dejó en mi ser.
Sé muy bien que tú me quieres,
tu vida, tu cuerpo
me has entregado,
mas nunca te he engañado.
Sabes que en mi memoria
otro nombre está grabado.
Tocas mi cuerpo,
recibes mi calor y mis besos
pero mi corazón ya es de otra
a quien no puedo olvidar.
Te veo desnuda,
eres preciosa.
Nunca te he dado nada
y tú me ofreces todo.
Sabes, cuando pegada a mi cuerpo vibras,
y entre sollozos me dices ¡Te quiero!
Me quedo callado,
no sé qué decirte
y escuchas como respuesta un suspiro
mientras mi mente se fuga
y con otra mujer hago el amor.

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